Te proponemos una receta de pollo guisado con champiñones muy fácil de preparar y absolutamente deliciosa. ¡Te va a encantar!

Este pollo guisado con champiñones es sencillo y está de lujo, con muy pocos ingredientes básicos te montas un platazo de lujo. En este caso preparamos un pollo guisado que cocinamos con cebolla, pimiento y unos dientes de ajo y al que luego le añadimos unos champiñones y un poco de bacon salteado. El resultado te va a sorprender.
Nosotros lo acompañamos de unas patatas salteadas, pero puedes tomarlo con un poco de pasta, con arroz blanco o con patatas fritas, cualquier guarnición irá de maravilla con este plato.
Si a ti también te gustan las recetas de pollo, no te puedes perder el pollo al vino o coq au vin, una receta francesa de pollo guisado que está absolutamente deliciosa; los muslos de pollo asados son fáciles de hacer y un clásico de cualquier comida; el pollo a la naranja al horno, un plato original y muy sabroso, el pollo guisado con cerveza es otro clásico que nunca falla; el pollo sentado a la cerveza es muy original y queda jugosísimo; y las alitas de pollo al ajillo con setas son un aperitivo de excepción. Vamos a por la receta.
Índice (acceso rápido al contenido)
Ingredientes del pollo guisado con champiñones para 4 personas:
- 4 muslos y 4 contramuslos de pollo.
- 140 gr de bacon.
- 200 gr de champiñones.
- 8 dientes de ajo.
- 2 puerros.
- 2 cebollas grandes.
- 1 pimiento verde.
- Una cucharadita de tomillo seco.
- 3 cucharadas soperas de aceite de oliva.
- 400 ml de vino blanco.
- 100 ml de brandy.
- 800 ml de caldo de pollo o agua (hasta cubrir).
- Sal y pimienta al gusto.
Preparación del pollo guisado con champiñones:
– Pon a calentar una olla donde quepa toda la carne con un chorrito de aceite de oliva.
– Pela y pica la cebolla en juliana, es decir en tiras finas.
– Elimina la parte verde de los puerros, lávalos y córtalos también en juliana fina.
– Pica el pimiento verde en cuadritos.
– Cuando el aceite esté caliente, añade la cebolla, el puerro y el pimiento y pocha muy bien las verduras a fuego lento, es decir, cocínalas a fuego muy lento hasta que estén bien tiernas y la cebolla esté transparente. Este proceso te llevará entre 20 y 25 minutos. Cuanto más lentamente cocines las verduras, más rico estará el guiso.
– Mientras tanto pon a macerar el pollo con las 3 cucharadas de aceite de oliva, el tomillo y los dientes de ajo pelados y enteros y deja que coja sabor mientras se cocina la verdura.
– En el momento en que las verduras estén listas, pon a calentar una cazuela baja donde quepa todo el pollo a fuego vivo y añade un chorrito de aceite de oliva.
– Dora muy bien las piezas de pollo por todas partes junto con los dientes de ajo a fuego vivo.

– Riega las verduras con el brandy, sube el fuego y desglasa bien la cazuela, es decir, despega con una cuchara de madera cualquier resto que pueda tener pegada la olla.
– Cuando el pollo esté listo, incorpóralo junto con los dientes de ajo a la cazuela donde están las verduras y riega todo con el vino blanco.
– Cocina un par de minutos a fuego vivo para que el vino evapore el alcohol y, en ese punto, añade agua o caldo hasta que quede cubierto al ras, no hace falta que la carne flote. Tapa la cazuela y cocina todo a fuego lento durante una hora o hasta que la carne de pollo esté muy tierna.

– Transcurrido ese tiempo, destapa el pollo y comprueba que la carne está en su punto. Si es así, saca el pollo, retira los dientes de ajo y elimínalos y tritura muy bien la salsa con una batidora hasta que quede bien fina.
– Vuelve a añadir las piezas de pollo y pon la salsa a reducir a fuego vivo para que coja consistencia, en unos 10- 15 minutos la tendrás en su punto.

– Mientras tanto, corta el bacon en taquitos y ponlo en una sartén al fuego sin nada de aceite.
– Limpia los champiñones con un trapo húmedo y sécalos bien, corta un pelín el tallo y trocéalos en cuartos, si son muy grandes en sextos y añádelos a la sartén con el bacon.
– Cocina los champiñones con el bacon (añade un poquito de aceite si fuese necesario), hasta que ambos ingredientes estén bien hechos.

– En el momento en que tengas una salsa con cuerpo, pruébala y añade sal y pimienta al gusto.
– Incorpora los champiñones y el bacon bien escurridos (sin nada de grasa) al guiso de pollo y cocina todo junto a fuego lento durante 5 minutos más para que se integren los sabores.

– Y ya tienes listo un delicioso pollo guisado con champiñones que está para mojarte dos barras de pan de una sentada. ¡Un espectáculo!
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