Los níscalos asados al horno son facilísimos de preparar y un aperitivo delicioso. Anímate con esta receta que triunfará en cualquier picoteo.
Esta receta de níscalos asados al horno no tiene ningún trabajo y con ella te marcas una tapa de excepción. Es tan fácil como contar con unos buenos níscalos, limpiarlos bien para que no quede nada de tierra (este paso es clave porque es una seta que suele llegar muy sucia y si se queda algo de tierra, el bocado puede resultar poco agradable) y dejar que el horno haga el resto del trabajo. Es importante que queden en su punto y, si quieres, le puedes añadir una picada de ajo y perejil, que les da un toque de sabor muy interesante.
A nosotros nos encanta aprovechar algunos fines de semana del otoño para irnos al monte a buscar níscalos y luego disfrutar del botín obtenido preparando diferentes recetas con esta seta tan sabrosa, que funciona fenomenal en preparaciones como la de hoy y también en diferentes guisos y platos de cuchara.
Si a ti también te gustan los níscalos, no te puedes perder el guiso de níscalos con patatas, que es reconfortante y está de lujo; el guiso de costillas con níscalos es otro de esos platos de cuchara que saben a otoño; las judías blancas con níscalos y codorniz son un capricho con todas las letras; la tapa de níscalos y huevos de codorniz es ideal para servir en un aperitivo y los níscalos al ajillo con jamón son muy sencillos y también están muy ricos. Vamos a por la receta de los níscalos asados al horno.
Índice (acceso rápido al contenido)
Ingredientes de los níscalos asados al horno para 4 personas:
- 400 gr de níscalos.
- Aceite de oliva.
- Sal y pimienta al gusto.
- Opcional: 1 diente de ajo y un poquito de perejil fresco.
Preparación de los níscalos asados al horno:
– Limpia muy bien los níscalos, quitando los restos de arena o pinocha con un paño húmedo. Después sécalos muy bien.
– Precalienta el horno a 180 ºC, calor arriba y abajo.
– Colócalos en la bandeja del horno, previamente engrasada con un chorrito de aceite de oliva.
– Riégalos con un poco más de aceite.
– Si quieres darle un toque de sabor, puedes picar el diente de ajo y echarlo a un mortero, añadir las hojas de perejil picado y un pelín de aceite. Machaca todo junto hasta conseguir una pasta y pinta los níscalos con esta picada.
– Salpimienta las setas al gusto.
– Hornea los níscalos durante 15 minutos a 180 ºC, calor arriba y abajo, o hasta que veas que están tiernos. Para comprobarlo, pínchalos con una brocheta, si están blandos, los tendrás preparados.
– Sirve los níscalos asados al horno bien calientes y disfruta de este pedacito de otoño. Esta tapa te va a fascinar.
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