El arroz con leche es un postre típico de nuestra gastronomía mediterránea, rico y nutritivo. Este postre tiene un sabor a canela y a limón que lo hace irresistible para casi todos. El problema es que, a veces, al prepararlo el arroz se pega a la cazuela y se estropea.
Para conseguir que no se pegue, llena un bol con agua templada y sumerge el arroz. Manténlo en el agua durante media hora. Pasado este tiempo, escúrrelo y prepáralo como lo haces siempre. ¡Quedará perfecto!
Pues la verdad es que sí que es un truco muy útil porque yo tengo problemas con dos platos: las lentejas y el arroz con leche. Siempre se me pegan.
A ver si de esta manera cosigo logar un buen arroz con leche.