¿Conoces el jarabe o sirope de arce? Es el emblema gastronómico de Canadá y hace una pareja de lujo con tus tortitas en el desayuno.

El sirope de arce es un endulzante natural que se obtiene de la savia del árbol de Arce, por lo que su producción se centra principalmente al noreste del continente norteamericano, siendo Canadá el productor principal en todo el mundo. Tanto es así que el jarabe de arce canadiense se ha convertido en un emblema gastronómico y cultural del país, promoviendo su uso en todo el mundo como sirope para acompañar tortitas y gofres, aunque también se utiliza en la cocina dulce y salada.
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La historia del jarabe de arce
El origen del sirope se remonta a los nativos americanos, antes de que los colonos europeos llegaran a lo que se denominaría el nuevo mundo. Estos individuos ya conocían cómo disfrutar la azucarada y nutritiva savia del árbol de arce, endémico del continente que si bien presenta ciertas variaciones, la mayoría podían ser utilizados para obtener una jarabe dulce y delicioso.
Con un color dorado, espejo, sabor dulce y un aroma característico, el jarabe de arce es similar a la miel y a otros jarabes de origen vegetal, como el de ágave o la mezcla de caña con sirope de frutas.
Sin embargo, su sabor único y claramente reconocible le ha permitido concebirse como el rey acompañante de gofres y tortitas, pero además, poco a poco se ha visto su potencial como ingrediente en demás platos y postres gastronómicos.
¿Cómo se obtiene el jarabe de arce?
Se prepara a base de la savia del arce norteamericano, su origen exacto es una incógnita sin resolver. Pero a pesar de ello, algunas fuentes indican la presencia de un sistema de producción de sirope de arce desde el siglo XVI, sin embargo, la falta de evidencia evita datar la fecha en particular.
Aunque las historias de las tribus americanas sostienen que, recordemos que se tratan de mitos y leyendas, el creador quiso hacerle la vida a los humanos más fácil y para ello llenó los árboles con un líquido espeso, lleno de nutrientes y con un sabor simplemente maravilloso.
Pero para que su pueblo no fuese holgazán, también introdujo una parte de agua con el de la savia, de esta forma solo podría estar disponible en primavera y el pueblo debía trabajar para sobrevivir el resto del año.
Además de delicioso, es sabroso
Este líquido está compuesto principalmente por sacarosa y, como lo decía su historia, un poco de agua. Por lo que pertenece al grupo de los edulcorantes naturales y su aporte nutricional energético es de unas 265-275 kcal por cada 100 gramos.
Por otro lado, más de la mitad del jarabe está compuesto por carbohidratos y más de la mitad de estos son azúcares libres. Si bien su índice glucémico es mucho menor al del azúcar blanco procesado, a efectos prácticos no hay realmente grandes diferencias, ya que el jarabe de arce es un sustituto perfecto para el azúcar.
El sirope de arce es, por tanto, una buena forma de endulzar postres y, como ya hemos mencionado anteriormente, un gran compañero de las tortitas americanas.