¿De dónde viene?
Hasta la época napoleónica, este alimento solo se extraía de la caña de azúcar. Sin embargo, a partir de este momento también empezó a utilizarse la remolacha azucarera para obtenerlo.
Clases de azúcar
Existen diferentes tipos de azúcar dependiendo de su procedencia y del grado de refinación que sufre en el proceso de extracción. La utilización de una u otra clase dependerá de dónde lo vamos a utilizar:
Blanquilla
Es el más conocido y el que más se utiliza en la cocina. Como su propio nombre indica, es de color blanco y tiene, como mínimo, un 97 por ciento de sacarosa.
Podemos encontrarlo granulado o en terrones.
Moreno
Esta variedad también es muy común. Se obtiene de los jugos depurados de la caña de azúcar y no se somete a ninguna refinación. Tiene un 85 por ciento de sacarosa y pequeñas cantidades de vitaminas, calcio, magnesio y otros minerales.
Es conocido como azúcar integral y es ideal para hacer bizcochos.
Glas
Se obtiene cuando se muele el azúcar blanquilla y el resultado es un polvillo que se utiliza en la elaboración de dulces.
Nuestros bizcochos quedan muy bien si los decoramos con este tipo de azúcar.
Puede ser blanco o moreno. Este azúcar se caracteriza porque está refinado en forma de grandes cristales transparentes.
Se utiliza en bebidas calientes porque es difícil disolverlo.
Demerara
Al azúcar blanca refinada se le añade melaza de caña para obtener la demerara. Su composición es la misma que la del azúcar moreno. La diferencia entre ambos está en la distribución de la melaza.
Es muy útil para endulzar postres, bebidas y todo tipo de repostería.